¿Es realmente efectivo el balón intragástrico para bajar de peso?

• Aunque no es una cirugía  muy popular, el balón intragástrico está siendo cada vez más popular. Se coloca por un periodo de seis meses para poder bajar de peso y lograr cambiar los hábitos alimentación. Sin embargo, no está fuera de riesgos.  

Por Francisca Orellana

Cuando las dietas para bajar de peso ya no surgen efecto, la cirugía bariátrica se transforma en una buena alternativa para reducir los kilos o prevenir enfermedades como la diabetes tipo 2.

La cirugía bariátrica no es una sola, hay varios tipos: está la manga gástrica, el bypass gástrico o el balón intra-gástrico. Esta última si bien no es la más popular, está siendo cada vez más frecuente luego que recientemente la FDA Americana aprobara su uso. ¿Pero es realmente efectivo?

Este método consiste en instalar una especia de globo en el estómago por vía endoscópica, un proceso que no dura más de media hora. La gracia es que este balón aumenta de volumen, lo que genera una sensación de saciedad en las personas.

El doctor Ricardo Mejia, cirujano digestivo Centro de Tratamiento de la Obesidad Red de Salud UC Christus, comenta que esta técnica está indicada para pacientes con obesidad moderada a severa, es decir, con un Indice de Masa Corporal de entre 30 y 40, y con alguna enfermedad o trastorno asociado al exceso de peso. No obstante, recalca que también se utiliza «en pacientes mega-obesos como terapia puente para lograr una baja de peso significativa antes de ir a una cirugía definitiva».

¿Es un éxito?

Pero, ¿qué grado de éxito tiene? El especialista comenta que toda cirugía, procedimiento y tratamiento debe ir acompañado de hábitos de vida saludables para asegurar el éxito al largo plazo. «En pacientes que logran adherir a un plan integral (nutrición, ejercicio y abordaje psicológico) como complemento a la instalación del balón, se puede esperar una baja de peso dos a tres veces mayor que la terapia médica por sí sola», dice.

La baja de peso, eso sí, dependerá de cada paciente. 

Sin embargo, advierte que los resultados al largo plazo no son tan buenos como las otras cirugías. «Aproximadamente un 20% de pacientes logran mantener una baja de peso luego de dos años de su retiro», señala el doctor Mejía.

Pese a la baja tasa de éxito, el especialista explica que recurren a ella porque hay pacientes que no quieren someterse a una cirugía más invasiva como sería el caso del bypass o manga gástrica. «También se recomienda en pacientes que tengan muy altos riesgos quirúrgicos  y en aquellos con IMC entre 30 y 35 sin cormobilidad. Pero se evalúa caso a caso», indica.

RIESGOS

Si bien tiene complicaciones, esta cirugía presenta menores riesgos que las otras. «Entre un 2 a 3 % de los pacientes se les debe retirar el balón en los primeros días luego de su instalación ya que no lo toleran por dolor o vómitos persistentes. Y en general el dolor y las náuseas son frecuentes, pero manejables con medicamentos», dice.

Agrega que en pacientes que sobrepasan el período sugerido de instalación (6 meses) puede haber complicaciones como ruptura del balón  y su desplazamiento al intestino delgado que pudiese generar una obstrucción intestinal.

Así es que ya saben, si están buscando opciones de cirugías, conviene siempre preguntar por orientación respecto a los tipos que existen y cuál te conviene más. Y preguntar siempre respecto a los riegos que pueden tener.