¿Por qué se siente más frío después de una cirugía bariátrica?

• Ya no se siente frío sólo en invierno u otoño, sino durante todo el año. Los especialistas recomiendan optar por comidas calientes y hacer ejercicio para combatirlo. 

Por Francisca Orellana (@franorellana)

Sólo quienes se han realizado una cirugía bariátrica para bajar de peso o tratar enfermedades como la diabetes o la hipertensión pueden saber que cuando dicen que tienen más frío de lo común, es porque realmente es así. 

Porque no estamos hablando de la menor temperatura que se siente en invierno u otoño, sino de un frío generalizado en el cuerpo durante cualquier época del año y que hace perder cualquier protocolo. De ahí, que se hace habitual que se ocupe en mayor cantidad los calcetines de polar o las parkas de pluma o se usa chaleco incluso en primavera o verano.

Pese a que los especialistas indican que esta menor tolerancia al frío es una consecuencia transitoria, lo cierto es que perdura por mucho tiempo, y para algunos, no se vuelve a recuperar nunca la temperatura corporal que se tenía hasta antes de la operación.   

Pero por qué ocurre? Sucede porque al bajar de peso, se pierde una gran cantidad de grasa, que es la capa térmica que tenemos para soportar el frío o el calor. El cirujano digestivo de la Clínica Vespucio, Marco Rioseco, explica que efectivamente es muy común que los pacientes sometidos a una cirugía bariátrica sienten mucho más frío que antes.

«Se  debe a que hay una ingesta mínima de calorías por la alimentación y a disminución progresiva de la grasa. Esto afecta tanto a hombres como mujeres y no tiene relación con el peso en exceso, ni con la cantidad bajada. Es una sensación bastante molesta para algunos pacientes y lamentablemente no hay un tratamiento específico», afirma el especialista. 

Pese a que no hay tratamientos para volver a la temperatura térmica anterior, hay mecanismos para afrontarlo. De partida, el doctor Alberto Pérez Castilla, cirujano de Clínica Indisa, afirma que aumentando la actividad física, y por ende, la masa muscular, permitirá tener una mejor tolerancia al frío. 

Junto con cuidados obvios como mantenerse abrigados, indica que beber infusiones calientes también puede ser una buena opción. «Más que una comida en específico, es necesario mantener la ingesta de platos y bebidas calientes», afirma. 

Es una consecuencia negativa de la operación, pero que con simples cuidado se puede sobrellevar. «Se debe evitar exponerse a las bajas temperaturas, ya que también tendrán las defensas bajas. Por lo tanto, la bufanda y  buenos abrigos, sumado al constante entrenamiento físico  es lo más aconsejable», concluye.